Para mantener a raya la inflación descontrolada de requisitos y peticiones, tanto los proveedores de soluciones como las aseguradoras necesitan disciplina, colaboración y un mantener la concentración siempre en cuáles son las necesidades reales de los usuarios. No es necesariamente malo introducir cambios en el plan del proyecto, especialmente si tenemos en cuenta que las estrategias de gestión de proyectos más populares en la actualidad, como las cascadas ágiles e híbridas, son metodologías flexibles y permiten cambios de última hora. Pero la variación y la inflación del alcance del proyecto sí debería mantenerse bajo control, para asegurarnos de que no tenga un impacto negativo en el resultado a largo plazo del proyecto. Estas son las principales prácticas recomendadas:
La solución de control de cambios
Aunque el alcance del proyecto crezca, no tiene por qué descarrilar automáticamente. Un método válido sería utilizar un plan de control de cambios, o sea, un documento que describe los pasos que seguirá un equipo de proyecto para identificar y actuar en respuesta a una solicitud de cambio de alcance. Esta herramienta ayudará a que el proyecto avance con paso firme.[1] Debe incluir apartados que describan cómo se presentarán las solicitudes de cambio, cómo se evaluarán, cuáles serán los límites para plantear solicitudes de cambio y las tarifas aplicables.
El plan de control de cambios contribuye a determinar qué requisitos son importantes y cuáles deben descartarse si existe el riesgo de que el alcance del proyecto se descontrole. También puede proporcionar herramientas (por ejemplo: designar a una persona que tome la decisión final, una lista de honorarios y elegir una junta de control de cambios) en las que apoyarse cuando la indecisión amenace con empeorar la situación.
Muy a menudo, cuando se trata de una implementación de software compleja, es inevitable que se altere el alcance del proyecto. Por eso es fundamental contar con un plan de control de cambios de alcance que acompañe y complemente al plan del proyecto. Estos planes deben comunicarse con total claridad a todas las partes interesadas, esto es crucial. Como también lo es explicar qué aspecto debería tener el éxito final del proyecto y su despliegue en la práctica.
La última palabra
Las implementaciones de software de seguros tienen su propio conjunto de desafíos característicos y la inflación del alcance figura entre las dificultades más habituales. Invertir tiempo y esfuerzos colaborativos para gestionar (y superar con éxito) las variaciones del alcance equivale a invertir en el éxito general del proyecto. Porque de esa inversión se benefician tanto la aseguradora como el proveedor de soluciones y, lo más importante, el proyecto en sí.